Mi maltrato
Quiero alzar
mi canto
a todas esas
mujeres maltratadas,
que intentan,
ocultar la
realidad,
tal vez,
por amor o tal
vez por miedo.
Yo fui una de
ellas y si algo,
atormenta mi
cabeza,
es el haberlo
hecho,
tratando de
esconder esa verdad ,
sin darme
cuenta,
que solo me
dañaba,
una vez más a
mí misma.
Sentí,
sus grandes
manos,
en mi cuello
muchas veces,
intentándome,
quitar el aire
que respiraba.
Hasta el punto
de que hoy por hoy,
me dejo
acariciar mi cuerpo,
por la persona
que amo,
menos esa
parte,
por que aun
siento la debilidad
y esa agonía
que se envuelve en él.
Cuantos años
calle,
porque pidió,
mil veces mi
perdón
y lo creí.
Pasando de sus
manos,
a algunos años
de tranquilidad,
aun sin amor
por mi parte,
pero de
comodidad por otra.
Pero el
maltratador,
siempre
vuelve,
y al paso del
tiempo me llegaron,
esos insultos
y abandonos,
que quizá,
duelan más,
por qué te
quedan grabados en el alma.
Tal vez me
pudo mi orgullo,
de no querer
volver,
al lugar de
donde salí y de donde,
verdaderamente
me querían.
Pero te das
cuenta,
que los años
pasan y ya no eres,
esa niña
inocente a la que podían,
manejar a su
antojo,
como una
marioneta a la cual,
le van
cortando las cuerdas una a una
y es cuando,
decides
dejarlo todo e intentar,
empezar de
cero,
antes,
de que te las
corten del todo.
Me juzgaron,
me
sacrificaron,
sin nadie
saber nunca,
la realidad de
mi desolada vida,
porque a pesar
de todo,
nunca borre,
mi sonrisa
inocente de mi rostro.
Hoy por hoy y
aun,
bajo los
recuerdos,
de aquellos
años pasados,
pero no por
eso,
olvidados y
aun habiendo prometido,
no volverme a
enamorar,
soy feliz.
Porque todos
los hombres,
no son iguales
y encontré,
a esa persona,
que me sabe
valorar y quererme,
pero sobre todo,
respetarme.
Si eres una
mujer maltratada,
nunca hagas lo
que hice yo,
porque te
envuelven,
de tal manera,
que te hacen
sentir culpable a ti misma,
para ellos
quedar,
como ese
corderito manso,
que esconde su
disfraz de lobo,
para escoger y
matar a su pieza.
Piensa que
nunca estarás sola,
por que,
los que
verdaderamente te quieren,
te ayudaran,
estarán
contigo,
nunca te
abandonaran.
Aun estas a
tiempo,
porque,
cada día que
pasa,
te estas
jugando el que mañana,
tal vez,
no te puedas
levantar.
Nunca pensé
llegaría a decir esto,
ahora soy
libre,
se lo que es
el amor verdadero,
ya no tengo
por qué ocultar mi realidad.
Y a pesar de
que muchos que me conocen,
se
sorprenderán,
dándose también
cuenta,
de mi lucha
día a día,
con lo que
desde el principio,
tenía fecha de
caducidad.
Yo aguante
catorce años y he callado,
muchísimos
más,
ahora espero,
que esto
sirva,
para que todas
las mujeres,
que sufren
algún tipo de maltrato,
sean valientes
y vuelen alto,
como yo volé.
Mª Amparo@todos
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