Maldito dinero

Maldito dinero

El dinero,

es el motor más importante,

por lo que se mueven,

las personas ambiciosas,

haciendo que cada vez quieran más y más,

sin aprender a decir "basta".

Con él,

creen que pueden comprarlo todo,

pero no es así,

podrán comprar el remedio,

para alargar una enfermedad,

en centros privados o en el extranjero,

pero al final,

morirán como todos,

porque aún no han inventado,

la píldora de la vida eterna.

Podrán comprar sexo,

pero jamás el amor,

porque eso,

no posee precio de venta.

Tendrán muchos amigos o mejor dicho,

conocidos,

porque los amigos son aquellos,

que están a tu lado en lo bueno y en lo  malo

y los que suelen estar con ellos,

solo es por conveniencia.

Podrán ir a restaurantes caros,

de esos,

que hay que ir de etiqueta y el metre,

no se aparta de tu lado,

para que nada les falte y como no,

cumplir esos protocolos,

donde hasta un simple estornudo,

puede ser de mala educación.

Con lo bien que comemos los demás,

en el bar de Pepe, de Paco o de Toni,

donde se puede entrar en chándal y zapatillas

a comer esos aperitivos tan ricos

y donde todo el mundo se conoce.

Hay tantas razones,

por lo que no me gustaría ser rica.

Me gusta estar con mi familia y poder,

disfrutar de ellos,

en cambio los adinerados o no tienen o la ignoran,

por falta de tiempo.

Me gusta estar con los amigos,

para reír,

hablar,

incluso llorar alguna vez que otra,

sabiendo disfrutar cada momento.

Y sobre todo,

me gusta tener a la persona que quiero

a mi lado,

y poder compartir con él,

todo lo que en mi vida acontece.

Si algún día por cosas de la vida,

tuviera mucho dinero,

seguiría siendo tal cual soy

siempre compartiéndolo con los demás,

con los que realmente me quisieron y que cuando,

no tenia nada,

estuvieron a mi lado y me ayudaron.

Han muchos pobres,

que se han convertido en ricos,

olvidándose pronto de lo que fueron,

de los que pasan por tu  lado y ni siquiera,

ya te conocen,

sin saber,

que la vida pasa deprisa y esos papeles de colores,

se van volando y quizá.

algún día tengan que volver a ser,

lo que fueron.

Será entonces,

cuando se darán cuenta,

de que se han quedado sin nadie,

tan solo con su avaricia,

de querer se mas que los demás.

Mª Amparo@todos los derechos reservados.